𝐄𝐋 ππ€π‚πˆπ…πˆπ’πŒπŽ 𝐄𝐒 π€ππ“πˆπ‚π‘πˆπ’π“πˆπ€ππŽ

𝐄𝐋 ππ€π‚πˆπ…πˆπ’πŒπŽ 𝐄𝐒 π€ππ“πˆπ‚π‘πˆπ’π“πˆπ€ππŽ γ…€ En la parΓ‘bola de los talentos, Cristo deja en claro que los judΓ­os son los enemigos, y advierte de manera simbΓ³lica que hay que derrotar a los enemigos. HAY QUE VOLVER A LOS CATΓ“LICOS PELIGROSOS OTRA VEZ.
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