¡TREMENDO¡ GUANTAZO de ABASCAL a SÁNCHEZ ¡Que LO OBLIGA a SALIR POR PATAS del CONGRESO a cuál RATA!

Santiago Abascal, el líder de VOX, desató una tormenta verbal en el Congreso de los Diputados, apuntando sus dardos envenenados hacia el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Abascal, con una mezcla de desdén y acritud, acusó a Sánchez de ser un auténtico pelele, un mangante de la política, dispuesto a arrastrarse y vender el patrimonio nacional con tal de mantenerse aferrado al poder. La acusación central de Abascal giró en torno a la alegación de que Sánchez está perpetrando una chapuza monumental, prostituyendo la economía y la convivencia pacífica de España, todo por un puñado de días más en el trono del poder. El discurso de Abascal fue una auténtica escabechina verbal, describiendo a Sánchez como un auténtico rascanalgas que pretende amnistiar el delito de traición, una movida que, según Abascal, tiene el tufillo de una autoamnistía encubierta. La legislación en cuestión, tildada por Abascal como “la ley de demolición del estado de derecho“, recibió un ostiazo retórico, acusándola de ser un golpe a la Constitución y un atentado contra la dignidad nacional. La retórica de Abascal no se detuvo ahí; avanzó lanzando acusaciones de corrupción política, comparando la actual situación con las fechorías de largo caballero e Indalecio Prieto, señalando a Sánchez como el maestro de ceremonias de una fiesta de impunidad y descrédito político. La imagen que pintó Abascal fue la de un Sánchez y su gobierno como un mascachapas, dispuestos a cualquier cosa, incluso a legitimar crímenes contra la Constitución y promover la violencia, todo para mantenerse en el poder. En un crescendo de condena, Abascal profetizó que de toda futura violencia política en España, Sánchez y sus cómplices serían los principales responsables. Este discurso fue más que una diatriba; fue una llamada a la acción contra lo que Abascal ve como una traición monumental y un ataque flagrante a los cimientos democráticos de España. Abascal concluyó su alocución con un desafío directo a la oposición, instándola a no facilitar la renovación del Consejo General del Poder Judicial en medio de lo que él considera un asalto al estado de derecho y a la Constitución. Su mensaje fue claro: es hora de levantarse contra la chapuza, contra el desgobierno de Sánchez, y restaurar la dignidad y la integridad de España. Este discurso, cargado de epítetos y acusaciones, no solo buscaba humillar a Sánchez sino también movilizar a la oposición y a la ciudadanía contra lo que Abascal y VOX perciben como una amenaza existencial para la nación española. En su estilo característico, Abascal no dejó piedra sobre piedra, pintando un cuadro apocalíptico de la situación política de España bajo el liderazgo de Sánchez, un cuadro que, según él, solo puede ser rectificado con una oposición unida y decidida a poner fin a la era de lo que considera el más despreciable gobierno en la historia reciente de España.