Juan Maldacena en el centenario de la Relatividad General

Cuando era chico, su papá -ingeniero- era de arreglar la lavadora o el automóvil en casa y eso, dice, atizó la llama de su curiosidad por averiguar cómo funcionan las cosas. La física de la escuela le ayudó a entender lo cotidiano mientras oxigenaba su natural fascinación con el universo. De ahí a la universidad -en Instituto Balsero, en Bariloche, Argentina- y el amor y la fascinación por esa disciplina lo llevaron a doctorarse en la universidad de Princeton, en Nueva Jersey. Cerca de allí, en el mítico In
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